“¡Aquí
no se ensaya ya! ¡Se rueda!” Alex de la Iglesia
Esta
película, que también ha sido escrita por el director bilbaíno junto con Jorge
Guerricaechevarría, se define como “comedia terrorífica”; cuenta la historia de
dos jóvenes, interpretados por Mario Casas y Hugo Silva, que atracan una tienda
de compra-venta de oro y posteriormente intentarán huir a Francia con el botín.
En su viaje se toparán con unas brujas que les pondrán obstáculos para evitar
que consigan su objetivo.
Este es el tráiler oficial de "Las brujas de Zugarramurdi":
Este es el tráiler oficial de "Las brujas de Zugarramurdi":
El rodaje
durante esos días se estaba llevando a cabo en el Palacio del Infante Don Luis,
situado en la ciudad madrileña Boadilla del Monte. El pasado día estuvieron
grabando en los exteriores de la localización, donde se podía ver a un gran
equipo rodando una escena con un taxi, lo cual parece ser un elemento constante
en la película, pues anteriormente grabaron en el centro de Madrid (en la
Puerta del Sol) otras escenas en las que también aparecía el vehículo. Cabe destacar
el mérito de todo el equipo por haber superado las temperaturas ínfimas días
durante esos días, y eso es algo que no se podrá apreciar cuando se vea la
película.
El 7 de
noviembre se rodaba en el interior del palacio. En este momento ya llevaban cinco
semanas de rodaje. Concretamente en la cocina; un gran espacio equipado con un
horno de leña, que fue decorado completamente para el rodaje, pues el palacio
era diáfano. Entre el atrezo se podían ver velas, fuego, calderos, pócimas,
ungüentos, sapos, serpientes, etcétera.
Mario Casas,
concentrado en su papel de Tony, iba vestido con unos pantalones verdes, camisa
azul, botas y una pistola o, como él la llamaba, una “pipa”. Mientras, Hugo
Silva llevaba camisa de cuadros y pantalón rojo. Cabe apuntar que los colores
del vestuario de ambos personajes son opuestos, con lo cual eso también se
podrá ver reflejado en sus personalidades.
En el rodaje
cabe destacar la buena coordinación y organización entre los miembros del
equipo, que en el día del rodaje en el palacio serían unos treinta o treinta y
cinco miembros. Cuando se termina de rodar una toma, cada operario sabe lo que
tiene que hacer. Unos se ocupan del vestuario, otros de la iluminación, otros
de las cámaras, etcétera. Los actores y operarios de cámara hacen un visionado
de las tomas grabadas junto al director Alex de la Iglesia, que les indica las
correcciones y les proporciona directrices para las siguientes tomas.
A la hora de
grabar cada uno de los planos, prevalece de alguna manera la economía de
medios, es decir, que se trata de hacer con los mínimos medios y intentando no
malgastar tiempo, pues en un rodaje cada minuto es dinero que se gasta; aunque
siempre intentando obtener la máxima calidad posible, pues se podía apreciar
que Alez de la Iglesia no se conformaba con cualquier resultado, sino que
intentaba perfeccionar todos los aspectos en cada toma. A este
perfeccionamiento también contribuía Kiko de la Rica, el director de
fotografía, habitual colaborador de del director. En cuanto al trabajo de este,
se puede destacar que los colores predominantes a lo largo de la película son
el naranja y el azul, lo cual se consigue a partir de la iluminación.
Alex de la
Iglesia confesaba que no solo graban las escenas en desorden, sino también los
planos de estas escenas; lo cual también contribuye al ahorro.
Casi todos
los días, el rodaje comenzaba sobre las siete de la tarde y terminaba alrededor
de las seis de la madrugada. En consecuencia de todo el trabajo realizado, se podían
ver algunos síntomas de cansancio cuando llegaba el final de la jornada. Para
intentar aumentar el rendimiento, compraban bebidas energéticas.
Hay algo que
nunca puede faltar en los rodajes; y eso son los imprevistos. Un momento
realmente cómico fue cuando, en el instante en el que se comenzaba a grabar un
plano, se rompió un frasco en cuyo interior había sapos vivos, y estos se
extendieron por el set de rodaje. Afortunadamente, los animales no sufrieron
ningún daño.
Otro de los sucesos
inesperados fue cuando a las cinco de la mañana se fue la luz y todo se quedó a
oscuras, aunque el equipo técnico consiguió solucionarlo con rapidez.
Como opinión personal, el nombre original del filme puede parecer un tanto complicado para algunos, sin embargo, de la Iglesia afirmó a través de Twitter que en su distribución internacional, llevará el nombre de "Bitches and Witches", el cual es realmente acertado.
El 24 de
noviembre finalizó el rodaje de Boadilla, para pasar por último a grabar en
platós de Cine y carreteras.
“¡Todos a
primera! ¡Colocamos los sapos! ¡Silencio!” Alex de la Iglesia
Nota: Quiero
darle las gracias desde aquí a Alex de la Iglesia por haberme permitido el
acceso exclusivo a su rodaje. Fue un gran honor estar junto a uno de los grandes
directores españoles, que además es una persona envidiable, lleno de vitalidad,
alegre y, ante todo, muy cercano. Por supuesto, no me perderé esta película de personajes rocambolescos, y
os recomiendo que vosotros hagáis lo mismo, pues es realmente prometedora.
* Todas las fotografías son originales y exclusivas
La ultima foto es un montaje malo no?
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