"El Doctor Frankestein" es una película del año 1931,
dirigida por James Whale.
Entre el reparto destacan Boris Karloff, Colin
Clive, Jhon Boles, Mae Clarke, Dwight Frye, Edward Van Sloan
Pertenece al género terror y está basada en los
mitos románticos como Drácula, el hombre lobo, la momia…… En cada época fílmica
estos mitos románticos reviven y nuevos directores realizan sus remakes
haciendo del cine el lugar donde la pulsión romántica pervive.
Estamos ante una película que corresponde a los primeros años de la
incorporación del sonido al cine. Un periodo de reflexión sobre los usos que se
le puede dar al sonido. Aunque los estudios harán de él un atractivo novedoso
para conseguir que la gente vaya al cine a experimentarlo.
El sonido es usado para crear sensaciones en el espectador, en concreto
en este largometraje consiste en campanas, pasos, rayos, truenos, gritos……Tan sólo hay música
en los créditos y predominan los silencios, como la mayoría de las producciones
de la época.
Tras un prólogo
que ayuda a marcar lo que más tarde se
verá y advierte al espectador, nos encontramos con la muerte. En un entierro
esperando a que todo el mundo se marche sin ser vistos están Henry Frankestein
y Fritz.
El joven doctor
Frankestein es un científico obsesionado con crear vida a partir de un cuerpo
creado por él mismo y la ayuda de su sirviente Fritz, una vez solos llevan a
cabo su misión, robar el cuerpo.
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De nuevo vemos en
acción al doctor y su ayudante y será Fritz por primera vez quien protagonice
una de las secuencias claves en muchos aspectos, tanto por cómo transcurrirá la
historia a partir de ese momento como por lo que el uso del sonido se hace en
ese momento de la historia del cine.
Tras una clase en la
universidad donde se experimenta con cadáveres están manipulando dos cerebros,
el primero era de una buena persona y el segundo de un criminal. De nuevo aguardan como lo hacían en el
cementerio Henry y Fritz y actuarán siguiendo la misma estrategia. Pero algo
ocurrirá y hará que Fritz abandone el lugar con el cerebro del criminal. La
peculiaridad de la escena es que ese algo es un sonido, es un gong extradiegético
y fuera de campo que hace que se le caiga el cerebro bueno. Ese momento está
marcado por el sonido.
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Mientras Henry realiza
las últimas comprobaciones aparecen su prometida Elizabeth, su amigo
Victor y su antiguo profesor, el sr. Waldman
preocupados por el joven y presencian el experimento.
Hay otros momentos
esenciales que también están marcados por el sonido como la vivificación del
monstruo donde una gran plataforma con el cuerpo creado completado se eleva para recibir un rayo que hará que el
cuerpo viva tras la descarga eléctrica. Al elevarse la plataforma el cuerpo
desaparece de campo y no lo vemos pero el sonido de nuevo marca la acción.
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La presentación de la
criatura es bastante singular, no es hasta su tercera aparición donde podemos
contemplarla, anteriormente se muestra con la cabeza tapada.
Tras el fallido intento
del profesor Waldman de acabar con el monstruo las cosas se complican y Henry
no podrá continuar con su vida sin más.
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La película se toma la
paciencia de preparar el aspecto visual y el efecto sonoro que se apoya en la
imagen. El sonido todavía no marca tanto el montaje como el rodaje. La poca
movilidad de la cámara facilitará que el ruido no se grabe en la banda
fotoquímica.
La obra es un claro
ejemplo de la construcción de la perspectiva, rasgo también del expresionismo.
Éste es un método
clásico no tan sólo del audiovisual, es la regla de oro de Aristóteles en su
Poética.
Por:Dulcinema
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